Funcionarios de la Escuela Fronteriza de Lonquimay iniciaron un paro indefinido, luego de semanas de denuncias por malas condiciones laborales, falta de respuesta por parte del Departamento de Administración de Educación Municipal (DAEM) y, más recientemente, la publicación de declaraciones falsas en redes sociales oficiales del municipio.
En Aurora Noticias recibimos la denuncia de una de las voceras de la movilización, Paulina Riquelme, quien asegura que la manifestación se debe a seis puntos críticos, entre ellos la inexistencia de un acercamiento pedagógico por parte del DAEM, falta de mobiliario en Educación Parvularia, y retrasos en la entrega de insumos básicos.
“Hemos tenido que organizar “Jeans Day” para comprar artículos de higiene e incluso pedir a los apoderados que traigan papel higiénico”, detalló.
Según lo que indican los funcionarios del establecimiento educacional, desde el DAEM se habían comprometido a realizar reparaciones para marzo, pero a la fecha solo se ha arreglado una estufa en kínder. Ante la falta de respuestas, este lunes comenzaron un paro indefinido donde solicitan expresamente una reunión con el alcalde de Lonquimay, Eduardo Yáñez, excluyendo intermediarios, debido a la pérdida de confianza en las autoridades educativas locales.
Riquelme indica que la situación se agravó cuando el municipio publicó en sus redes sociales que el paro obedecía únicamente al interés de mantener a la directora actual del establecimiento, afirmando además que los funcionarios se negaban a conversar si no se cumplía esta condición.
“Eso es absolutamente falso y ofende profundamente nuestra honra”, declaró Riquelme. “Lo único que pedimos es una reunión con el alcalde para exponer nuestros puntos, no la resolución inmediata de todo el petitorio”.
En este contexto, los funcionarios y voceros difundieron un video desmintiendo las acusaciones del municipio y reiteraron sus demandas. Además, se reunieron con tres concejales, de los seis invitados, para explicar su situación. En esta instancia, según Riquelme, el concejal Evaristo Curical Ñanco intentó comunicarse insistentemente con el alcalde, quien respondió después de las 18:00 horas, afirmando que no se reuniría con los funcionarios y comentó que ordenaría el descuento de sueldos a los movilizados.
“Frente a esta negativa, no nos quedó otra opción que radicalizar nuestra movilización y pasar a un paro completo, el cual será evaluado diariamente según la disposición de las autoridades”, explicó una de las voceras.
Por último, los trabajadores exigen, además, un documento oficial con disculpas públicas por la difusión de información falsa sobre los motivos de la movilización.
“Nuestro petitorio tiene seis puntos, pero hoy lo más urgente es ser escuchados directamente por el alcalde. Todas las instancias previas se agotaron”, dijo Paulina Riquelme.
